Las cadenas mundiales de suministro de prendas de vestir están bajo presión a medida que aumentan los precios de las fibras y otros materiales textiles, los costos de la energía se disparan y los costos de los fletes aumentan, según la «Estrategia de conversación: las cadenas de suministro de prendas de vestir golpeadas por la tormenta perfecta a medida que los costos aumentan en múltiples frentes», un informe de 6 páginas de la empresa de información comercial global Textiles Intelligence.
De 64 centavos de dólar a 120
El precio mundial del algodón, medido por el índice Cotlook A, casi se duplicó entre abril de 2020 y diciembre de 2021, de 64 centavos de dólar estadounidense por libra a 120 centavos de dólar estadounidense por libra.
Los productos terminados han tardado más en llegar a sus destinos debido a que la escasez de contenedores y los brotes de Covid-19 han detenido las operaciones y causado retrasos en los puertos. De hecho, en muchos puertos de destino, el tiempo promedio que los contenedores pasan en los depósitos, denominados «tiempos de permanencia», alcanzaron niveles casi récord en 2021 como resultado de una congestión severa.
Nuevos obstáculos legales
Para sumarse a los problemas de la industria de la confección, las empresas que importan prendas de vestir y otros productos textiles al mercado estadounidense que contienen materiales provenientes de la provincia de Xinjiang en China enfrentan un nuevo obstáculo como resultado de la Ley de prevención del trabajo forzoso uigur (UFLPA). Según la UFLPA, las empresas que deseen seguir importando productos fabricados en Xinjiang deben presentar «pruebas claras y convincentes» de que los productos en cuestión no se fabricaron con trabajo forzoso. Esto coloca la responsabilidad sobre las empresas en lugar de los funcionarios de aduanas.
Sin embargo, las cadenas mundiales de suministro de prendas de vestir son notoriamente complejas y, a menudo, es imposible rastrear los orígenes de los materiales utilizados en la fabricación de una prenda. Esto hará que sea inmensamente difícil para las empresas garantizar con confianza que los productos que suministran no contienen materiales provenientes de la provincia de Xinjiang de una forma u otra.
Problemas de acceso al algodón
Para garantizar que cumplan con la UFLPA, es probable que las marcas de ropa jueguen con seguridad y se abastezcan de lugares en los que puedan estar seguros de que no utilizan materiales fabricados en la provincia de Xinjiang. Esto limitaría significativamente la cantidad de algodón disponible para sus productos porque la provincia de Xinjiang representa alrededor del 90% del algodón producido en China y el 20% del algodón producido en todo el Mundo.
En este escenario, la cantidad de algodón disponible para las marcas de ropa podría reducirse en un 20% o más y, como resultado, es probable que los precios del algodón aumenten. En última instancia, tal aumento podría conducir a precios de ropa significativamente más altos en las tiendas minoristas.
