Las escuelas concentran el deporte juvenil

girl-958407_960_720Un estudio del Hospital Pediátrico de Mercy (en el Estado norteamericano de Kansas), revela que la mayor parte del ejercicio que realizan los adolescentes se produce en las escuelas. En los últimos 15 años, se redujo en un 25% el número de niños que van al colegio caminando. Alrededor de la mitad de la actividad física de los adolescentes jóvenes se realiza en la escuela, pero conforma apenas una fracción del tiempo que pasan allí, según un estudio reciente.

«Sabíamos que las escuelas eran una importante fuente de actividad física para los niños. Pero nos sorprendió que los niños pasaran apenas un 4,8% de su tiempo en la escuela siendo físicamente activos, la más baja de todas las ubicaciones -apuntó el autor líder del estudio, Jordan Carlson, director de investigación de salud con la participación de la comunidad del Hospital Pediátrico Mercy, en Kansas City-. Los niños tienen el instinto natural de moverse, y las escuelas pueden respaldarlo al ofrecer oportunidades para que los estudiantes sean activos, por ejemplo al incorporar la actividad física en el aula», añadió.

Una muestra de casi 550 adolescentes

Los investigadores midieron qué nivel de actividad física, entre moderada y vigorosa, realizaban a diario casi 550 adolescentes al suministrarles un rastreador GPS y un acelerómetro durante un promedio de siete días. Los adolescentes que conformaban el grupo tenían entre 12 y 16 años de edad y eran diversos en términos del sexo, la etnia, los ingresos familiares y el tipo de vecindario (que facilitaba el caminar o no). Vivían en las áreas metropolitanas de Seattle o de Baltimore-Washington, D.C.

Los niños pasaban alrededor de un 42% de su tiempo de vigilia en la escuela, y poco más de una cuarta parte de su tiempo en casa. También pasaban alrededor del 13% de su tiempo en sus vecindarios, y el 14% de su tiempo en otros lugares. En general, el estudio encontró que pasaban en promedio 39 minutos al día en actividad física de moderada a vigorosa, significativamente menos que los 60 minutos recomendados para un desarrollo saludable y para la prevención de la obesidad.

42% de su actividad física en la escuela

uss-nimitz-108622__180En los días de escuela, poco más de la mitad de esa actividad ocurría en la escuela, encontró el estudio. Cuando se realizó un promedio de toda la semana, incluyendo los fines de semana, los adolescentes hacían alrededor del 42% de su actividad física en la escuela. Hacían más o menos el 10% de su total de actividad física cada semana en el vecindario o cerca de la escuela, encontró el estudio.

A pesar de los menguantes presupuestos, es importante que las escuelas no descuiden el valor de la educación física, señaló la Dra. Jennifer Beck, directora asociada de medicina deportiva del Instituto Ortopédico de los Niños, en Los Ángeles.

«La implicación más importante de este estudio es que, como sociedad (lo que incluye a padres, educadores, proveedores sanitarios y autoridades gubernamentales) debemos hacer más por fomentar un estilo de vida saludable y activo entre nuestros adolescentes en riesgo», comentó Beck. Pero advirtió que este es un tema complejo y que los lectores «deben tener cuidado al sacar conclusiones específicas y concretas de los datos».

Mejor aprendizaje

running-498257_960_720Aun así, los estudios han mostrado que los niños aprenden mejor cuando tienen tiempo para la actividad física, «incluso cuando esto supone una reducción en el tiempo de estudio de las asignaturas académicas», dijo Beck.

Los hallazgos actuales también revelan lo mucho que han cambiado las vidas de los adolescentes respecto a hace unas décadas, antes de que los ordenadores y los dispositivos multimedia fueran comunes en los hogares, comentó la doctora Danelle Fisher. Fisher es vicepresidenta de pediatría del Centro de Salud Providence Saint John’s en Santa Mónica, California.

Para que los niños hagan suficiente actividad física, debe de haber cambios en casa y en la escuela, aseguró Carlson. Añadió que las escuelas necesitan maestros de educación física bien entrenados, recesos para los niños más pequeños, actividad física en el aula y juegos antes y después de clases, planteó. Los padres también pueden limitar el tiempo que sus hijos pasan frente a las pantallas y proponer a nivel local que los vecindarios sean más cómodos para los peatones.

Artículos relacionados