El impacto en las personas, en la sociedad, pero también en el planeta, fue analizado en la XX Jornada Retail organizada por Comertia en Cosmocaixa, en Barcelona, el pasado 8 de noviembre. En la segunda de las mesas redondas, Silvio Elias, cofundador de Veritas, quiso definir el impacto positivo en «dejar las cosas mejor que como las has encontrado antes de actuar». En este sentido, Elias hizo hincapié en el propósito de ese impacto, en el porqué. «En nuestro caso, queremos poner pasión en la alimentación, y si algo no consigue ese impacto no lo hacemos».
«¿Qué hijos dejaremos en nuestro planeta?»
Tras anunciar que Veritas desea ser «el supermercado más amable del mundo», Silvio subrayó que «el mundo se puede cambiar desde un supermercado». El cofundador de dicha cadena destaco la necesidad de «tener fans en tu equipo», que se convierten en los mejores prescriptores. Asimismo, planteó a la audiencia una cuestión nada menor, retorciendo una frase muy común para transformar su sentido: «¿Qué hijos dejaremos en nuestro planeta?».
Por su parte, Miquel Torres, director general de Familia Torres, quiso compartir una frase del ecólogo y científico Allan Savory que en su día asimiló y que ha puesto en práctica en sus viñedos: «Imitar la naturaleza en todos los procesos es posible». Fue a partir de 2008 que Torres fue consciente del cambio climático y sus efectos. «Queríamos que nuestros hijos continuaran produciendo vino y eso nos llevó a realizar un cambio ambicioso».
Reducción de la huella de carbono
De este modo, en 2020 iniciaron una reducción de la huella de carbono que, en 2030, será del 60%. Asimismo, impulsaron la creación de International Wineries for Climate Action, una asociación a la que se han incorporado más de 70 bodegas, incluidas algunas de Estados Unidos o Australia. «Hemos plantado cepas en zonas donde no había viticultura y hemos redescubierto hasta 64 variedades antiguas que hemos recuperado. Asimismo, nos interesamos por las razones por los que los bosques capturan las emisiones y las viñas no», explicó Miquel, quien recabó la colaboración de Allan Savory para llevar a cabo toda esa transformación vitivinícola que llevó a Torres a optar por una agricultura regenerativa, reduciendo las emisiones de CO2 y a recuperar la fertilidad de los campos Igualmente, han creado el certificado Regenerative Viticulture Alliance con el objetivo de extender esa metodología a los 7,4 millones de hectáreas de viña que hay en todo el Mundo.
Por su parte, la consejera delegada de Boboli, Arancha Algás, recordó que «el 20% de las aguas residuales provienen de la industria textil y esto nos hizo decidir a crear un camino para medir las acciones de sostenibilidad de la empresa. Pasamos de obrar por instinto a adoptar la metodología B Corp», una certificación que la compañía se ha comprometido a adoptar en 2024, ejercicio en el que tienen previsto que el 90% de la energía proceda de fuentes renovables.
«La sostenibilidad tiene que implicar a toda la empresa»
Algás también manifestó el convencimiento que «la sostenibilidad tiene que implicar a toda la empresa» así como que «podemos escoger los proveedores que observen procesos sostenibles o motivar a nuestros diseñadores para que opten por propuestas adaptadas a esos procesos».
La mesa redonda concluyó con una reclamación por parte de Silvio Elias, quien se preguntó «¿cómo es posible que el IVA de un producto saludable sea el mismo que un producto contaminante? Es necesaria una redistribución de la carga fiscal» que contemple aspectos sostenibles.
