La facturación de Under Armour creció en el primer trimestre de 2017 un 7% respecto al mismo periodo del año pasado hasta alcanzar los 1.100 millones de dólares. Un 20% de esta facturación corresponde a los mercados internacionales compuestos por la región EMEA, Asia-Pacífico y América Latina, en los cuales las ventas aumentaron un 52% de media. Sin embargo, en el punto fuerte de Under Armour, el mercado norteamericano, el volumen de negocio descendió un 1%, primera vez que ocurre esto en un trimestre.
Por su parte, los ingresos de explotación en estos tres primeros meses del año fueron de 8 millones de dólares y Under Armour experimentó unas pérdidas netas de 2 millones en este primer cuarto de año.
Estos resultados no varían las expectativas que la marca norteamericana publicó el pasado 31 de enero. Se espera que los ingresos netos crezcan entre un 11 y un 12% para alcanzar una cifra final de unos 5.400 millones de dólares. Lo que sí que se espera que descienda levemente es el margen bruto comparado con el 46,4% de 2016.
