Momento de cambio para el fitness

Gracias a su crecimiento en los últimos años, la gimnasia se ha con-vertido en una de las actividades deportivas más practicadas por los españoles. Según el Anuario de Estadísticas Deportivas 2016, el 15,4% de los españoles practica gimnasia suave al menos una vez al año, el 14,2% una vez al mes y el 11,9% una vez a la semana. En cuanto a la gimnasia intensa, los porcentajes de práctica son muy similares (anual, 15,5%, mensual 14,2% y semanal, 12%).

Las personas que se ejercitan en gimnasios públicos, constituyen el 13,2% de los deportistas y los que lo hacen en gimnasios privados son el 23%. El porcentaje de deportistas que practica deporte en casa se sitúa alrededor del 19%, y no existen diferencias significativas en las distintas franjas de edad por lo que respecta a este aspecto. Tampoco en este caso hay diferencias significativas por franjas de edad, excepto en los mayores de 55 que parecen más reacios a acudir a gimnasios privados. En cambio, las mujeres son más proclives que los hombres a acudir a los gimnasios privados y públicos.

Las actividades de fitness de más éxito

Hoy en día, en los gimnasios se realizan más actividades de fitness que nunca: zumba, cardio, step, GAP… Según Myriam Fernández, de Anita, «precisamente son las más exigentes las que más éxito tienen: el body pump y el CrossFit se presentan como las actividades de moda entre hombres y mujeres, creando comunidades de auténticos adeptos que no se pierden una sesión de su clase favorita. Ya no sirve ofrecer solo una actividad guiada tradicional como el aerobic, ahora el público pide más actividad, más desafío y más exigencia».

David Franco, de Concept2, cree que «los usuarios de gimnasios cada vez tienen un conocimiento más profundo de la salud y el fitness y son cada vez más exigentes en cuanto a servicios y equipamientos que demandan de un centro. Por eso los usuarios de fitness exigen equipamientos profesionales iguales a los que usan los deportistas de élite en sus entrenamientos».

Javier Centenera Martínez, responsable de Marketing de Johnson Health Technologies Iberica, que distribuye Horizon Fitness ha detectado que «las máquinas para actividades cardiovasculares se han vendido en 2016 por encima de los equipamientos de musculatura como las multiestaciones de trabajo. No obstante las máquinas para entrenamiento de fuerza se venden a muchos clientes y quedan muy satisfechos con su compra».

Mariangela Cicala, de Puma, observa que «ahora están muy de moda las actividades en grupo de entrenamiento en suspensión (TRX): Anteriormente se trataba de un ejercicio que se hacía en individualmente y ahora están pasando a hacerse en aulas de grupo. El fitness experimental también está en auge; se trata de hacer deporte en condiciones que no se limiten puramente al gimnasio, ya sea en familia o con amigos. Para esto están los clubs de actividades y aventuras outdoor. Otra forma de entrenamiento que está cogiendo fuerza es el de alta intensidad (HIIT); buscamos la máxima efectividad en el menor tiempo posible. Se podría decir que nada va a la baja, lo que antes eran actividades en sí como steps, bodypump, pilates u otras tantas, actualmente se combinan para optimizar el ejercicio. Un dato importante es que se están abriendo muchas escuelas especializadas de crossfit, así que nos podemos olvidar de las actividades clásicas ya que se complementan entre ellas para crear un nuevo estilo de deporte que tiene como principal objetivo el desarrollo de las capacidades y habilidades del ser humano».

Consumo de fitness masculino y femenino

¿Existen grandes diferencias entre el consumo de fitness de hombres y mujeres? Silvia Sarasúa, del departamento de Comunicación de Happy Dance, no las encuentra: «En lo que respecta al consumo de productos de fitness, las mujeres, como los hombres, buscan prendas que les permitan realizar sus ejercicios adecuadamente y que no comprometan su rendimiento: ropa transpirable, ligera, elástica y compresora. No obstante, la fisionomía de la mujer no es la misma que la del hombre. En Happy Dance intentamos, con nuestras prendas, dar solución a problemas que padecen en mayor medida las mujeres. El diseño también es un factor importante».

En cambio, Myriam Fernández, de Anita, distingue: «Los hombres buscan sobre todo practicidad o utilidad en las prendas. Sin embargo, la mujer busca algo más, ese aspecto estético y atractivo de la prenda, es decir, además de buscar que el producto ofrezca eficacia y cumpla con las características de comodidad y máxima sujeción, también cuida mucho que el producto sea bonito, atrayente…». Según Mariangela Cicala, de Puma, «a la mujer le gusta ir bien combinada en colores, llevar las últimas tendencias del mercado, y busca que la ropa que lleva favorezca la silueta. El hombre generalmente busca tecnología y comodidad, mientras que la mujer exige también diseño. Por otro lado, en el caso del textil femenino, el abanico de siluetas es mucho más amplio: Bras, tops, camisetas…»

El perfil del consumidor está cambiando

El perfil del consumidor de productos de fitness está cambiando, si bien algunas marcas todavía detectan un ligero predominio de los hombres. Javier Centenera Martínez, responsable de Marketing de Johnson Health Technologies Iberica, que distribuye Horizon Fitness, cree que «formalmente quien más con-sume productos de fitness es el hombre, seguido por los núcleos familiares y en menor medida las mujeres sin acompañantes». Ángel Sevillano, director general de Tomtom España, añade matices a esta foto fija: «El perfil de personas que realizan actividad física una vez al día son hombres y con edades comprendidas entre los 45 y los 54 años. Si nos fijamos en las personas que realizan deporte dos veces a la semana el perfil dominante cambia ya que se trata de mujeres con edades comprendidas entre los 18 y los 24 años».

Accede al contenido completo del reportaje en Diffusion Sport nº 492.

Artículos relacionados