Un símbolo tan internacional como la «V» de la victoria que en su día popularizó Winston Churchill identifica a Seger, firma sueca nacida en 1947 en la pequeña localidad de Röshult. La firma sigue, siete décadas después, produciendo en esa factoría no solo sus propios calcetines, sino también fabricando para terceros. Asimismo, ha añadido a su producción prácticos y coloridos gorros.
Uno de los aspectos más interesantes de la reciente historia de esta empresa familiar es su apuesta por la sostenibilidad. Y es que el pasado año, coincidiendo con su 70º aniversario, pasó a implementar su estrategia de energía renovable que le convierte en una empresa completamente verde.
Running y esquí, categorías principales
«Tenemos un compromiso con las generaciones futuras», manifiesta Susanne Segerqvist, diseñadora de la compañía y esposa del consejero delegado de Seger, Per Segerqvist, segunda generación de esta firma que está presente en una decena de países y que tiene en el running y en el esquí sus principales categorías de producto. Cabe señalar que, históricamente, la firma ha patrocinado a emblemáticos deportistas en distintas disciplinas, incluidos medallistas olímpicos.
Así, en 2017 la firma adoptó la energía eólica para alimentar sus unidades de producción en el area de Västergötland. Un cambio sostenible que se añade al uso de fibras respetuosas con el medio ambiente, pues la planta de Röshult trabaja con materiales de reciclaje, minimiza los residuos y crea soluciones a largo plazo para reducir el impacto ambiental. A la hora de seleccionar sus materias primas, Seger opta por la Bamlana (fibra de bambú) y la lana de merino tratada con Exp 4.0, un método que reduce el consumo de agua hasta en un 50% y minimiza los productos químicos durante la producción. Se trata del primer tratamiento de lana que cumple con exigentes requisitos de ecoetiquetado como Gots, Bluesign y Oeko Tex.
Laboratorio propio en la misma planta de producción
La enseña también fabrica medias personalizadas para determinados clubes deportivos y medias de compresión que son testadas en su propio laboratorio ubicado en la misma planta de producción. Unos controles que tienen como objetivo refrendar a diario la victoria con la que se identifica esta marca sueca.
