Más de un centenar de entidades de Barcelona han criticado la pasividad del consistorio que preside Ada Colau ante la creciente expansión de la práctica del ‘top manta’ en las calles de la capital catalana. Las mismas han emitido un manifiesto conjunto donde lamentan la falta de voluntad «explícita» del ayuntamiento para resolver el problema, subrayando que esta actividad genera una imagen de inseguridad y degradación de la ciudad.
«Los firmantes de este manifiesto reclamamos al ayuntamiento de Barcelona y a las demás administraciones competentes que actúen de forma inmediata contra la venta ilegal que se produce de forma masiva y reiterada en la ciudad», ha declarado la portavoz, María José López Samper, quien señala que el pasado año se formularon más de 63.000 denuncias por ordenanza de civismo, cifra relativamente superior a la media de los últimos años que se sitúa por debajo de las 59.500.
En 2015 se intervinieron más de 875.000 artículos procedentes de la venta ambulante ilegal, formada, entre otros, por prendas, gafas de sol o calzado. Los firmantes del documento no descartan emprender acciones judiciales contra el ‘top manta’, aunque se mantienen a la espera de la reacción del ayuntamiento de Barcelona, que este jueves, 30 de junio, tenía previsto comparecer en ruda de prensa para anunciar medidas al respecto.
