Durante el mes de julio, los precios del textil y del calzado registraron un descenso del 12,6%; un comportamiento atribuible al fenómeno de las rebajas y que habría repercutido significativamente en el retroceso del IPC en un 0,6%, pues el resto de productos y servicios experimentaron variaciones inferiores a un punto (salvo los de ocio y cultura, que observaron un alza del 1,6%).
En lo que va de año, las prendas y los zapatos se han abaratado un 15,1%. Se trata de un registro que contrasta claramente con el conjunto de la inflación, que desde enero habría caído dos décimas. Sin embargo, si se tienen en cuenta las cifras interanuales puede observarse que el textil y el calzado es uno de los capítulos que muestra un mayor incremento.
Un 0,9% de aumento interanual frente al 0,5% del IPC
Desde el pasado mes de agosto, los precios del vestido y del calzado han aumentado un 0,9%. Mientras, la cesta de consumo lo ha hecho en un 0,5%. Las prendas de mujer, con un alza del 1,3%, son las que han registrado un mayor incremento en este capítulo, seguidas del calzado femenino, que lo ha hecho en un 1,1% (al margen del 1,9% en que se han encarecido las reparaciones de calzado o del 1,2% de aumento de los complementos y reparaciones en textil).
A destacar que, durante el mes de julio, fueron los artículos textiles de niño y de bebé los que registraron mayores rebajas, con un 18,6% de media según las cifras del Instituto Nacional de Estadística.
