La Asociación para la Defensa de la Marca (Andema) ha redoblado sus esfuerzos en la sensibilización y concienciación en contra de las falsificaciones a través de la campaña «Lo que es auténtico es eterno. Juntos, en contra de las falsificaciones», una iniciativa que ha puesto en marcha en colaboración con las asociaciones de Francia (Unifab) e Italia (Indicam). Esta campaña, a la que también se ha unido la Asociación Española de Fabricantes de Productos de Marca (Promarca), pone énfasis en un consumo responsable de productos auténticos, que hayan pasado los pertinentes controles de calidad y adquiridos a través de canales de venta lícitos.
Para ello, se realizarán diferentes acciones, entre ellas la difusión de carteles que se podrán ver en las estaciones de AVE de Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga y Valencia, coincidiendo con el período prenavideño, fecha en la que se produce unsensible aumento de la venta de falsificaciones.
Autenticiudad: la unión hace la fuerza
La campaña también se llevará a cabo en París y en Roma, dado que se enmarca en el proyecto “Autenticiudad”, que busca formar una red de ciudades europeas comprometidas con la defensa de los derechos de propiedad industrial yel comercio local. En este plan conjunto participan las Asociaciones de Defensa de la Marca de Francia, Italia y España, junto con el Observatorio Europeo sobre Vulneraciones de Derechos de Propiedad Industrial, una institución dependiente de la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE (EUIPO) cuya sede se encuentra en Alicante.
“Autenticiudad” busca reconocer a los Ayuntamientos que apliquen una política activa de defensa del comercio local y las marcasfrente a la venta ilegal de falsificaciones concediendo un logotipo para su utilización en comunicación y en publicidad institucional. Alicante y Málaga son las ciudades españolas que ya cuentan con este certificado, junto a París y Roma.
El peso de las falsificaciones
De acuerdo con los datos recogidos por Andema en el estudio “La actitud del consumidos ante las falsificaciones”, los costes de las imitaciones para los Gobiernos y los consumidores de los países del G20 podrían superar los 125.000 millones de dólares al año y costar 2,5 millones de puestos de trabajo.
Según Andema el impacto de las marcas en la economía española en 2010 supuso más de 420.000 millones de euros (el 40% del total del PIB de España), con un aporte de 73.500 millones de euros en concepto de impuestos.
