Artículo publicado en VIA Empresa y reproducido con permiso expreso de su autora.
Rosa Juny, directora de la Fundació Pimec
Últimamente hemos enlazado con diversas crisis que han generado incertidumbre en distintos ámbitos, siendo el económico uno de los ámbitos más afectados. El ahorro parece no haber tenido sentido en estas pasadas décadas donde los préstamos y los créditos han sido los “reyes” de nuestra forma de vivir, generando así un volumen relevante de personas endeudadas. Es una filosofía que, desgraciadamente, ya viene marcada por algunos gobiernos que se endeudan por encima de sus PIB. Es cierto que, en los momentos más difíciles de la pandemia, la tasa de ahorro subió en algunos casos, pero para aquellas personas sin ahorros el hecho de ver peligrar sus empresas o sus trabajos les provocó y les seguirá provocando estados de alto nerviosismo y angustia.
Somos seres emocionales que razonamos
Solemos creer que las emociones son el problema
Son datos significativos que nos hacen pensar que el impacto de las crisis económicas sobre las emociones es relevante y muchas veces no se toma con la consideración que debería tener la gestión psicosocial de las personas en el ámbito laboral. Un aprendizaje interesante en estas coyunturas de contingencia es el que plantea el médico psicoterapeuta Norberto Levy quien postula que “solemos creer que las emociones son el problema. Que el miedo, el enojo o la culpa, son los problemas que nos acosan. Y no es así. Se convierten en problemas cuando no sabemos como aprovechar la información que nos brindan, cuando nos enredamos en ellas y nuestra ignorancia emocional las convierte en un problema más”. De hecho, la resiliencia, que es la capacidad de hacer frente a las adversidades y, inclusive, salir fortalecido de ellas sigue esta tesis de Levy.
Objetivo común de mejorar la salud mental de las personas empresarias y trabajadoras
Desde la Fundació Pimec hemos tomado cartas en el asunto y ofrecemos el servicio de atención telefónico psicoemocional para cualquier persona empresaria y su familia con la colaboración de la Fundación Salud y Persona y el Ayuntamiento de Barcelona. Además, acabamos de firmar un convenio con el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (Imim-Hospital del Mar) con el objetivo común de mejorar la salud mental de las personas empresarias y trabajadoras, dentro del ámbito de las organizaciones pymes. El acuerdo de colaboración establece que se facilitará el acceso de las pequeñas y medianas empresas a la participación en el proyecto europeo Mentupp, a través de las intervenciones diseñadas y facilitadas por el Grupo de investigación en Salud Mental del Imim para combatir el estrés, el ‘burnout’ y los síntomas depresivos y de ansiedad. ¿Te apuntas?