Patricia Manca es socia responsable de Entretenimiento y Medios en Pricewaterhousecoopers
El deporte está cambiando. Igual que muchos otros sectores, se está viendo enormemente influido por lo digital. En el fútbol tenemos, por ejemplo, la tecnología del VAR, por no hablar de los nuevos nichos como los e-Sports. Pero más allá de los deportistas, esta transformación está afectando a las empresas, que han puesto claramente el foco en el consumidor. Los directivos de la industria del deporte son conscientes del impacto que la digitalización puede tener en el crecimiento de sus compañías y se han lanzado al uso de estas herramientas. Pero también advierten de algunos riesgos, tales como la piratería o que los consumidores se despeguen de la forma tradicional de llegar a ellos: la televisión.
Es una prioridad mejorar la experiencia del consumidor, tanto en directo como en diferido. Se trata de lograr experiencias más inmersivas e interactivas que otros espectáculos con los que compiten. De hecho, los directivos del sector ven, en la relación con los fans, una buena oportunidad para monetizar el futuro, así como para crear sinergias con los gamers, siendo un crossover para que los gamers se conviertan en fans y los fans en gamers.
Crecimiento previsto del 6,4%
Éstas son algunas de las conclusiones del estudio ‘Sports industry: time to refocus‘, elaborado por PwC a partir entrevistas a cerca de 600 directivos de la industria del deporte, y que analiza las previsiones de crecimiento del sector. En los próximos tres a cinco años se prevé que los ingresos de la industria del deporte crezcan un 6,4%. Sin embargo, este incremento no será igual en todo el Mundo. En Europa, Norteamérica y Australasia el aumento será más moderado. Asia y Oriente Medio, por contra, son los mercados con mejores perspectivas, y crecerán hasta un 8,7%.
Por sectores, el segmento de los eSports es el de mayor potencial. El 86% de los encuestados creen que los videojuegos, tanto de acción y fantasía como de simulación de otros deportes, serán los que más crezcan. Les siguen, ya dentro de los deportes tradicionales, el fútbol, baloncesto y los deportes urbanos.
Además, del estudio se pueden desprender otras conclusiones:
• Deporte femenino: Según el documento, el gasto de las mujeres aglutina entre el 70% y el 80% del mercado de bienes de Por tanto, hay un enorme potencial en las audiencias femeninas. Este último año ha sido récord en términos de seguimiento de eventos deportivos femeninos, y especialmente, en el fútbol. Algunos partidos, como el que enfrentó a las selecciones inglesa y estadounidense, fueron a alcanzar los 11,7 millones de espectadores. En España, 60.739 fans se congregaron para ver el Atlético de Madrid – FC. Barcelona en el Wanda Metropolitano, lo que supuso un récord en nuestro país y a nivel internacional. Y más allá del fútbol, otros deportes como el rugby ganan cada vez más atención en su modalidad femenina.
Esta tendencia está haciendo que desde el punto de vista de los sponsors la situación haya mejorado, y que muchas de las grandes marcas se estén involucrando en estos acontecimientos deportivos. Además, el deporte femenino también es una buena vía para llegar al público masculino: según los datos de la European Broadcast Union, el 68% de los que siguieron el mundial a través de la plataforma online de Eurovision Sport TV, eran hombres.
• Transformación e innovación: Las organizaciones deportivas tienen que innovar para conseguir cambiar los hábitos de consumo y poder competir así con las nuevas formas de entretenimiento. El 94% de los entrevistados ven la innovación como algo importante o muy importante. Sin embargo, solo el 46% están poniendo en marcha estrategias para implementar la innovación. El fútbol es un buen ejemplo de cómo un deporte tradicional ha adaptado aspectos de su juego a la tecnología, con el antes citado caso del VAR o el uso de tabletas en los banquillos para el análisis de estadísticas.
• Escuchar: Para conseguir innovar es necesario prestar atención a los consumidores, socios y empleados. El engagement, esa conexión tan preciada con el público, solo se consigue escuchando y estando dispuesto a cambiar la estructura de las organizaciones. Para ello es necesario madurez y agilidad, y aceptar los errores. Además, las personas son la clave en el éxito: sin talento, cultura y liderazgo, las estrategias que se lleven a cabo tienen menos posibilidades de prosperar. La diversidad y las habilidades de la plantilla son consideradas por el 88.6% de los encuestados como una de las claves del éxito.
• El futuro en el consumo será digital: Hoy ya es una verdad universalmente aceptada que el futuro del consumo de deporte será, en último término, digital. Por tanto, aunque la televisión va a seguir teniendo mucho peso en los próximos años, y especialmente, entre el público de edad más avanzada, la tendencia hacia lo digital es clara e imparable. En general, el streaming online de deporte ha crecido entre un 2% y un 8%, aupado por la tendencia de los proveedores de televisión tradicionales a ofrecer sus contenidos online en plataformas digitales y por el crecimiento de las plataformas OTT. Lo que está claro es que los consumidores están cada vez más dispuestos a pagar por contenido: más de la mitad de los entrevistados están dispuestos a pagar por este tipo de contenidos.
• El papel de las federaciones deportivas: Con la proliferación de eventos establecidos por actores privados, ¿debería dejarse al propio mercado determinar quién gana y quién pierde? Las federaciones son vitales para un desarrollo sano y sostenible de sus respectivos deportes. Cada uno necesita contar con un conjunto de reglas para garantizar la integridad de la competición.
Artículo publicado en la revista Ideas y reproducido con el permiso expreso de su autora.