Tras los 255 trabajadores que perdieron su empleo en Oregon (Estados Unidos) en el mes de julio, Nike anuncia ahora que tiene previsto despedir a otros 490 a finales de septiembre. Esta acción está enmarcada dentro la política de despidos masivos anunciada por la gigante norteamericana en el mes de junio. En esta, está contemplado el despido del 2% de su plantilla, lo que supondría aproximadamente una cifra cercana a los 1.400.
El objetivo de esta reestructuración es la venta de manera más directa al consumidor, como la venta a través de Amazon, eliminando intermediarios. Desde la compañía apuntan a «un trato más personal con el cliente» como motivo de la decisión. Asimismo, Nike también ha confirmado que no es una medida temporal, sino que los despidos serán definitivos, y que los afectados ocupan puestos desde hace muchos años dentro de la empresa.
Recientemente, una quinta parte de la plantilla de Nike en India también se quedó sin empleo, medida que también forma parte de este plan de reestructuración global.
