Albert Vinyals i Ros es doctor en Psicología del Consumo y profesor en Escodi
El comercio online cumple perfectamente con unos de los principales motivadores de los consumidores: los CRUP: Comodidad, Rapidez, Utilidad y Precio. Comprar online es Cómodo, lo solemos hacer desde el sofá. Es Rápido, al menos la compra en sí. Es Útil ya que hay de todo y cubre la principal necesidad en la sociedad de consumo: el tiempo. Y tiene en el Precio su principal baza, al no pagar locales, ni a tanto personal. Por esto, se expande tan rápido, llegando a hacer que en Estados Unidos cierren hasta centros comerciales. Entonces, ¿nos encaminamos hacia un mundo sin comercio de calle?
Desaparecerá el comercio que sea un simple almacén
El comercio físico está muy vivo. Lo constatan las colas que había en Navidad en un centro comercial para visitar la noria de una juguetería, o el éxito de pequeños comercios que hacen talleres, que innovan, que conocen a los clientes por su nombre, que sorprenden, que creen en lo artesano, o en la hiperespecialización y te saludan con un “buenos días”, sincero. Desaparecerá el comercio que sea un simple almacén, pero el que genera vida, tiene un largo recorrido. Lo constatan estudios, como el realizado por Escodi para el Rec Stores de Igualada (Barcelona), el evento de tiendas efímeras, cuando al preguntar a sus clientes “qué le añadirían al evento”. La principal respuesta fue “más actividades”, en lugar de pedir “más ofertas”, o “más marcas”. La gente se quiere divertir al comprar.
Mostrar, Emocionar, Solucionar, Simplificar e Impactar
Así, frente al CRUP, o en paralelo, encontramos otros factores que hacen atractiva una tienda. Se trata del acrónimo MESSI: Mostrar, Emocionar, Solucionar, Simplificar e Impactar. Una estrategia cuyo nombre, ya augura éxito. Así, un buen comercio debe saber Mostrar en qué puede beneficiar al cliente y que esto tenga la máxima visibilidad en todo lo que hace, aportando un posicionamiento único. También debe Emocionar, ya que sin emoción no hay acción: ya sea explicando historias (‘storytelling’), haciendo que sucedan cosas en sus tiendas (marketing experiencial), o simplemente, ofreciendo una experiencia agradable al comprar. Las ofertas comerciales deben aportar Soluciones al cliente, siempre partiendo de deseos y necesidades no resueltas. Por ejemplo, una tienda donde un adulto, pueda encontrar un regalo para un adolescente, o propuestas para el día del padre, que realmente hagan ilusión. Para conseguirlo, debe Simplificar los mensajes: mostrar solo lo esencial , lo que defina la esencia del negocio, que son los beneficios para el cliente. Finalmente, para ser recordado, debe Impactar. Nos gustan las cosas distintas, sorprendentes, que nos seduzcan, nos diviertan, incluso con un punto de misterio, ya que somos consumidores de improbabilidades en un mundo cada vez más homogéneo y globalizado.
De enemigo a aliado
Estas estrategias son experiencias de compra que una pantalla, aún, no puede ofrecer. Así que ni ha llegado el apocalipsis del retail, ni el e-commerce es el enemigo a batir, sino que puede ser el aliado. Simplemente, debemos formarnos para saber como combinarlos (estrategias omnicanal) y saber posicionar cada oferta comercial adecuadamente, para disfrutar del placer de ayudar a comprar mejor, ya sea en la calle, o desde el sofá.
Artículo publicado en el blog de Albert Vinyals y reproducido con permiso expreso de su autor.