El peso de las falsificaciones en el comercio mundial se prevé que aumente en los próximos años y que, en 2022, acabe suponiendo un 5% del total, equivalente a más de 882.000 millones de euros. Así se desprende de una entrevista que la agencia Efe ha efectuado el consejero delegado de la Asociación Internacional de Marcas (Inta), Etienne Sanz de Acedo, quien ha explicado que el impacto de la piratería en el empleo se duplicará en los próximos cinco años, alcanzado en 2022 los 5,2 millones de puestos de trabajo perdidos.
En esa entrevista, el directivo señala que la venta de productos piratas o falsificados supusieron el 2,5 % del comercio internacional en 2013, cifra que se traduce en unos 410.000 millones de euros. Sanz de Acedo pone de manifiesto el «impacto enorme« que provocan estas actividades en la economía, al subrayar que son «fenómenos globales», ya que afectan a «todos los sectores empresariales» y se producen en «todo el Mundo».
El consejero delegado de Inta subraya que la falsificación y la piratería son «delitos» que no solo perjudican a las empresas, sino que también afectan a los consumidores, puesto que las marcas permiten «identificar el origen de los productos». Sanz de Acedo indica que, con estas actividades ilícitas, la economía sale perdiendo, tanto a través de la eliminación de puestos de trabajo, que ha evidenciado con cifras, como con los impuestos que no se llegan a recaudar.
