«No quedó ningún detallista sin atender en cuanto a programación»
El directivo razona que parte del éxito de ese comportamiento radica en el hecho de que «otras firmas competidoras no han cumplido sus compromisos de servicio, lo cual empujó a muchos clientes a acudir a Hi-Tec para disponer de producto en sus puntos de venta». En cualquiera de los casos, Fernández destaca que «no quedó ningún detallista sin atender en cuanto a programación, pero sí que no hubo suficiente mercancía para las necesidades de reposición».
Para Roberto Fernández es importante señalar, asimismo, que «el buen sell out registrado consiguió un muy satisfactorio sell in. A ello ha contribuido el disponer de una muy buena colección, que cubre las necesidades de manera óptima». Todas esas circunstancias han comportado una ampliación de la cartera de Hi-Tec, tanto por el desembarco de nuevos detallistas que han depositado la confianza en la marca como por la recuperación de antiguos clientes.
Crecimiento de hasta un 80% en botas
El director general alude a la línea de trail como una de las que mayores crecimientos ha observado. Por su parte, el calzado de trekking ha experimentado mejoras de entre el 30 y el 40% en la campaña de verano, «pero hay que advertir que el de media caña, las botas, ha progresado en un 80% -afirma-. Bien es verdad que las cifras son algo menores que las correspondientes al calzado bajo». También las sandalias consiguieron un buen comportamiento, con aumentos del 25%.
Roberto se felicita, asimismo, «de no haber sufrido problemas de suministro. Todo es fruto de habernos sabido anticipar a la situación, lo que permitió que antes del 20 de enero ya dispusiéramos de toda la mercancía de verano 2022 y que a principios de marzo estuviera prácticamente toda servida».
«El calzado constituye uno de los sectores que mejor redistribuye la riqueza»
Pese a la incertidumbre que se vive en el entorno en cuanto a las posibilidades de desabastecimiento, Fernández apunta que «Hi-Tec no tiene previsto cambiar de proveedores. No es el momento oportuno». Sí lamenta que el entorno ilicitano perdiera en su día la condición de zona zapatera. «El calzado constituye uno de los sectores que mejor redistribuye la riqueza, por el sinfín de pequeños componentes que intervienen en su fabricación, lo cual implica la participación de múltiples empresas y que se generen muchos puestos de trabajo. Un modelo sencillo de calzado puede llegar a reunir hasta ochenta piezas. Los consumidores no son suficientemente conscientes de la complejidad que existe detrás de la producción de un zapato».
Las expectativas para el presente ejercicio también son optimistas. «Ignoramos cómo se desarrollarán los próximos meses, pero la evolución seguida hasta ahora nos permite vislumbrar un crecimiento en torno al 50%».
«Garantizar el servicio era la principal necesidad del mercado»
Asimismo, el director general avanza que «en 2023 asistiremos a una renovación sustancial de la colección. En este último año hemos mantenido un planteamiento más conservador, limitándonos a aplicar nuevos colores a algunos de los modelos que ya veníamos ofreciendo al mercado. Era momento de ser cautos para facilitar la producción y, sobre todo, poder garantizar el servicio, pues ésa era la principal necesidad del mercado».