Entrevista a Josep-Francesc Valls, director de la Cátedra Retail en la UPF-BSM
Josep-Francesc Valls tiene una enorme responsabilidad: la de formar a los futuros profesionales del retail. Como director de la Cátedra Retail, Turismo y Servicios en la Universitat Pompeu Fabra-Barcelona School of Management, a él le corresponde liderar este proyecto que debe proyectar a los jóvenes en la actividad detallista, descubriéndoles las claves de este negocio y, sobre todo, despertando su inquietud para que sepan aprovechar sus múltiples oportunidades.
Usted que tiene contacto con estudiantes que, supuestamente, desean orientar su trayectoria hacia el retail, ¿qué inquietudes detecta entre esos jóvenes?
El sector del retail no es uno de los más excitantes en la universidad. Desde la Cátedra intentamos hacerlo más atractivo, porque nuestro objetivo reside en atraer talento a esta actividad. Si no están interesados los alumnos y se van hacia otros campos, el retail adolecerá del talento que tengan otros sectores. El talento es el motor del cambio. Las universidades no estamos cuidando debidamente el sector del retail. Nuestros esfuerzos van por este camino.
«Estamos para conseguir que el talento descubra las oportunidades que plantea el retail»
¿Qué más se puede hacer para convertir en atractivo el retail para la juventud?
Muchas cosas. El otro día celebramos una ‘challenge’, un reto en el que invitamos a unos veinticinco alumnos de distintos masters, y les propusimos realizar una primera sesión en la que les presentábamos el escenario del retail. En ella, tres empresas explicarían su experiencia cómo implantar el ecommerce en las tiendas alimentarias para hacerlo rentable. Tras efectuar las presentaciones, uno de los alumnos les preguntó a los responsables de esas empresas por qué invertían el tiempo con ellos, a lo cual la respuesta fue «porque entendemos que aquí existe un talento que nos puede interesar mucho. Y si tenemos contacto directo con este talento podemos captarlo». Estamos intentando avanzar en iniciativas similares, con visitas a empresas, proyectos finales de master, con reuniones de empresarios… para conseguir que el talento descubra las oportunidades que plantea el retail y, al mismo tiempo, el retail pueda sondear el talento existente.
Pero algo se habrá hecho mal para que, de entrada, este sector no atraiga a la juventud.
Hay que tener en cuenta que la imagen de los sectores va evolucionando. En la década de los 70, que el hijo fuera ingeniero constituía la aspiración de todas las familias; posteriormente, la banca; en determinados momentos, el sector tecnológico… El retail no ha conseguido una imagen pública de atracción de talento y ha ido perdiendo notoriedad. Es nuestra obligación demostrar que este sector goza de una gran vitalidad, que gracias a las nuevas tecnologías estamos en condiciones de ser un sector relevante dentro del contexto económico, y que con esta nueva figura del comerciante, junto con el cliente, reordena la cadena de suministro y adquiere un protagonismo más destacado que el que tenía en los últimos veinte o treinta años.
«Los grandes expertos y consultores afirman que el 75% de los puestos de trabajo de 2030 todavía no sabemos cuáles son»
No se trata solo de atraer talento, sino de retenerlo. Existe todavía mucha rotación en este sector.
Yo detecto mucha estabilidad en las familias. Si cogemos las medianas empresas comprobaremos que las nuevas generaciones se están formando a conciencia. Pero adicionalmente de las familias hay que extraer mayor talento. Probablemente también habría que reordenar las posiciones profesionales en el seno de las cadenas, de las tiendas, porque si no la actividad se empequeñece y para determinados profesionales ambiciosos aquello resulta demasiado reducido. Tenemos que plantear la posibilidad de que haya auténticas carreras profesionales en el retail, con pocos escalones para poder gestionar una tienda de pequeño tamaño pero con mayor recurrido para asumir la responsabilidad de comercios de mediano o gran tamaño. En el momento de identificar cuáles son las profesiones de futuro en nuestro sector, lamentablemente acusamos muchas deficiencias. Los grandes expertos y consultores afirman que el 75% de los puestos de trabajo de 2030 todavía no sabemos cuáles son. En el caso del retail probablemente son tres puntos más. Tenemos que acabar de identificar cuáles son esas oportunidades habrá en el retail, y evitar que el joven que se plantee introducirse en este ámbito asimile el trabajo en el comercio a perfiles como el de reponedor, transportista… Desde las cadenas se está trabajando de una forma importante y desde las Universidades tenemos que prestar apoyo a estas iniciativas.