Oriol Paré es retail team manager y socio de Integra Retail.
¿Por qué nos cuesta tanto mantener la constancia en los equipos? No eres tú, es nuestro cerebro. Éste está diseñado para ayudarnos a sobrevivir y por lo tanto, agradece encontrar formas de reducir la incertidumbre. La incertidumbre va asociada al riesgo y al peligro y pone a nuestro cuerpo en modo de alerta al primer indicio de una amenaza y eso consume mucha energía.
Está demostrado científicamente que los equipos con un líder consistente, aunque sea tóxico, están menos estresados que los equipos liderados por personas empáticas pero imprevisibles. El motivo es que valoramos más la consistencia que la justicia. Como nuestro cerebro está diseñado para identificar y prevenir las amenazas, ante un líder tóxico pero constante en su forma de dirigir sabemos qué esperar. Sin embargo cuando tratamos con una persona impredecible, el cerebro debe estar permanentemente en alerta con el desgaste que esto conlleva. Si volvemos al diseño de nuestro cerebro, nos damos cuenta de que nos ayuda a sobrevivir y por lo tanto a ahorrar energía.
Si tenemos claro que el cerebro prefiere la certidumbre, ¿por qué es tan difícil la constancia en los equipos?
A pesar de que nuestro cerebro aprecia la predictibilidad, también se siente atraído por la novedad ya que en ocasiones obtiene recompensas satisfactorias y entonces se inunda de dopamina (el neurotransmisor que nos hace sentir bien). Así pues, a veces anticipamos la recompensa cuando fijamos un objetivo por primera vez. Cuando decidimos trabajar por un objetivo, al inicio nos concentramos más en la recompensa que en el esfuerzo que conlleva. Sin embargo, cuando llega el momento de poner en práctica de forma repetida las tareas necesarias para alcanzar dicho objetivo, empezamos a concentrarnos más en el esfuerzo y perdemos de vista la recompensa que tanto nos motivaba al inicio.
Cuando las recompensas no son inmediatas, nuestro cerebro se centra más en el esfuerzo que en la recompensa y eso provoca que nos cueste tanto ser constantes.
5 razones por las que perdemos la constancia en los equipos y cómo superar la falta de perseverancia
1. Los objetivos tienen que ser específicos
Para que nuestro cerebro “compre” el objetivo, podemos planificar las acciones necesarias y ponerlas por escrito. Eso hará predecible el trabajo necesario y nuestro cerebro estará más motivado para llevarlo a cabo. Para nuestro cerebro será más importante saber qué tenemos que hacer en cada momento que la recompensa que obtendremos a medio plazo.
2. Debemos crear un entorno adecuado para el seguimiento del plan
Recuerda que el cerebro quiere ayudarnos a sobrevivir, lo que significa que quiere conservar energía. Si nuestro nuevo hábito requiere energía extra, es menos probable que lo incorporemos por completo en nuestra vida. Una de las mejores maneras de facilitar el seguimiento de un plan es la automatización de las tareas más básicas para que nos ayuden a seguir el plan de acción. Crear pequeñas rutinas nos servirá para hacer predecibles algunos rituales y nos facilitará el seguimiento del plan.
3. El resultado final no es el único objetivo, marquemos micro objetivos que nos ayuden a acercarnos poco a poco al objetivo final
Los resultados son importantes ya que nos ayudan a saber cuándo alcanzamos nuestro objetivo. Sin embargo si únicamente nos centramos en el resultado final, y éste está lejos en el tiempo, será difícil mantener la constancia. Si por el contrario somos capaces de plantearnos micro objetivos que nos vayan acercando al objetivo final, nuestro cerebro irá recibiendo pequeñas recompensas que le ayudarán a seguir el plan.
4. No dejes sola a tu fuerza de voluntad
Es normal que en determinadas ocasiones la fuerza de voluntad se vea superada por una tentación. Las tentaciones se pueden superar con fuerza de voluntad pero a veces hay que poner herramientas que nos eviten distracciones capaces de vencer a nuestra fuerza de voluntad. Volviendo al punto número 1, si tenemos el plan organizado, evitamos distracciones y tentaciones que pongan a prueba nuestra fuerza de voluntad. Una manera de ayudarnos a seguir el plan es asumir responsabilidades concretas. Si aceptamos responsabilidades dentro del equipo, y las concretamos en el tiempo y su alcance, será más fácil evitar tentaciones ya que nos hemos comprometido con nuestros compañeros.
5. Haz que la rutina sea variada
La consistencia a veces puede ser aburrida. Crea actividades para que el equipo disfrute fuera de la rutina habitual. Salir del espacio habitual puede ser una motivación y a veces algo tan simple como hacer una reunión en el parque un día soleado puede ser una buena motivación. Sé creativo y busca qué puede motivar a tu equipo sin dejar de lado la constancia necesaria. Normalmente no es necesario dedicar esfuerzos económicos sinó imaginación y ganas de hacerlo.
Entrena a tus equipos en la constancia con un método probado
La constancia es determinante en la consecución de los objetivos y entrenar a los equipos para mantenerla requiere un entrenador preparado. En integra retail somos conscientes de las dificultades de los líderes para mantener la constancia en los equipos. Al mismo tiempo sabemos que sin constancia, los objetivos son inalcanzables para los equipos. Por estos motivos entrenamos a los equipos para mejorar de forma constante y mantenemos la motivación y creatividad necesarias para afrontar los cambios que seguro van a sorprendernos de forma permanente.
Artículo publicado en el blog de Integra Retail Retrain y reproducido con permiso expreso de su autor.