Verónica González es consultora en ventas B2B y fundadora de Smart Business.
Si has llegado a este post es porque no te gusta vender, ¿verdad?
Entre los emprendedores es muy común tener miedo a vender por la incertidumbre del resultado final, por sentirse rechazados o por creer que están presionando al cliente generándole incomodidad.
Estoy segura de que si pudieras quitarte de encima esta tarea y que los clientes te llegaran solos, firmarías ahora mismo. Pero hay algo que no puedes perder de vista. Y es que nadie mejor que tú conoce tu producto o servicio. Por eso mismo, eres la persona idónea para venderlo.
¿Cómo perder el miedo a vender?
Cuando pensamos en habilidades de venta, se nos viene a la mente el comercial con traje y maletín que atosiga a sus clientes por el móvil o haciéndoles visitas inesperadas en sus empresas. No queremos que nuestros clientes tengan esa imagen de nosotros.
Por suerte, la venta ha cambiado mucho estos últimos años siendo más respetuosa y fluida, y centrándonos en ayudar a nuestro cliente potencial.
Vender no es solo recibir. Cuando vendes das valor y prestas un servicio por el que recibes dinero a cambio. Desapegarte del resultado final te ayudará a centrarte en dar más que en recibir. La última palabra la tiene tu cliente y si te dice que no, puede que no sea tu cliente ideal o no era su momento. De ventas fallidas obtendrás grandes aprendizajes para seguir mejorando.
Es importante que detectes las creencias, prejuicios e inseguridades que están detrás de tu miedo a vender para que las trabajes y puedas alcanzar tus objetivos de ventas.
4 claves para vender sin vender
En mi propia experiencia creando más de 50 negocios, formando a vendedores, creando equipos y vendiendo mis propios servicios, he detectado las 4 claves que te ayudarán a vender sin sentir que estás vendiendo.
1. La honestidad y la integridad con tu cliente y contigo mismo. Si crees que no puedes ayudarle, díselo y déjalo ir.
2. Poner el foco en ayudar al cliente por encima de todo para que resuelva el problema que tiene, desapegándote del resultado y haciendo de sus objetivos los tuyos.
3. Generar confianza y seguridad en nuestra marca y propuesta de valor. Es clave para que nos empiece a conocer y pueda decidir si le interesa lo que le ofrecemos.
Por ejemplo, en mi servicio de mentoría Creación Smart, enfocado a hacer que un negocio funcione en 6 meses, ofrezco una masterclass gratuita en la comparto mi metodología Smart que he aplicado en 50 negocios, para que me vean en acción, sepan cómo trabajo y si conectan conmigo o no.
4. Ser respetuoso con los tiempos del cliente. Puedes estar presente y acompañarle en su decisión resolviendo sus dudas u objeciones. También puedes generar urgencia y escasez pero sin ser pesado y sin presionarle para que tome la decisión ya.
Artículo publicado en Smart Business B2B y reproducido con permiso expreso de su autora.